La Fabada Asturiana: Historia y Receta de un Icono Gastronómico
- Mario Jalín
- 7 jun 2024
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 12 jun 2024
Bienvenidos a la tercera entrega de nuestro blog en la Sidrería Manolo Jalín. Hoy, queremos llevaros a un viaje culinario a través de la historia de uno de los platos más emblemáticos de Asturias: la fabada. Además, compartiremos con vosotros nuestra receta tradicional, para que podáis disfrutar de este manjar en casa.

Orígenes de la Fabada
La fabada asturiana es un guiso que tiene sus raíces en el corazón de Asturias, una región conocida por su rica gastronomía y productos de alta calidad. Aunque no se sabe con certeza cuándo se cocinó la primera fabada, se cree que este plato comenzó a ganar popularidad en el siglo XIX. La fabada se ha convertido en un símbolo de la cocina asturiana, apreciada por su sabor robusto y su capacidad para reconfortar en los fríos días de invierno.
Ingredientes Clave
La clave de una buena fabada reside en la calidad de sus ingredientes. En la Sidrería Manolo Jalín, utilizamos productos de proximidad para asegurar que cada plato esté lleno de sabor y autenticidad. Aquí están los ingredientes básicos de nuestra receta tradicional:
Fabes de Granja: Estas alubias blancas y mantecosas son el corazón de la fabada. Cultivadas en la región, su textura y sabor son inigualables.
Compango: Una selección de embutidos que incluye chorizo, morcilla y panceta. Estos ingredientes aportan profundidad y un sabor ahumado característico al guiso.
Ajo y Cebolla: Las bases aromáticas que enriquecen el sabor del guiso.
Azafrán y Pimentón: Especias que añaden un toque de color y complejidad al plato.
Aceite de Oliva y Sal: Para realzar y equilibrar los sabores.
La Receta Tradicional
Preparar una fabada requiere tiempo y paciencia, pero el resultado final vale cada minuto. Aquí os dejamos nuestra receta paso a paso:
Ingredientes:
500 gramos de fabes de la Granja
2 chorizos asturianos
2 morcillas asturianas
200 gramos de panceta
1 cebolla
2 dientes de ajo
Unas hebras de azafrán
1 cucharadita de pimentón
Aceite de oliva virgen extra
Sal al gusto
Instrucciones:
Remojar las Fabes: La noche anterior, pon las fabes en remojo en abundante agua. Deben hidratarse durante al menos 12 horas.
Preparar el Compango: En una cazuela grande, añade un chorro de aceite de oliva y sofríe ligeramente la cebolla picada y los dientes de ajo enteros. Añade el chorizo, la morcilla y la panceta, y cocina a fuego medio hasta que los embutidos suelten parte de su grasa.
Cocer las Fabes: Escurre las fabes y añádelas a la cazuela junto con los embutidos. Cubre todo con agua fría, asegurándote de que el nivel del agua sobrepase unos dos dedos las fabes.
Condimentar: Añade las hebras de azafrán y el pimentón, y mezcla bien. Cocina a fuego lento, sin que llegue a hervir violentamente, durante unas 2-3 horas. Es importante que el guiso se cocine lentamente para que las fabes queden tiernas y los sabores se integren.
Espumar y Ajustar: Durante la cocción, retira la espuma que se forma en la superficie con una espumadera. Esto ayudará a obtener un caldo más limpio. Añade sal al gusto en los últimos 30 minutos de cocción.
Reposar y Servir: Una vez cocidas, deja reposar la fabada durante unos minutos antes de servir. Esto permitirá que los sabores se asienten. Sirve caliente, acompañada de un buen trozo de pan.
Un Plato para Disfrutar en Compañía

La fabada asturiana es más que un plato; es una celebración de la tradición y la buena compañía. En la Sidrería Manolo Jalín, nos enorgullece ofrecer este manjar a nuestros clientes, preparado con la misma dedicación y amor que han pasado de generación en generación. Te invitamos a visitarnos y probar nuestra fabada, hecha con ingredientes de calidad y cocinada con pasión.
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